mié. Dic 25th, 2024

SAN FELIPE.- Debido a los altos niveles de saxitoxina en el Alto Golfo de California, detectados en los monitoreos permanentes que realiza la Comisión Estatal para Protección contra Riesgos Sanitarios de Baja California (COEPRIS BC), se declara la veda para la cosecha de moluscos bivalvos (ostras, almejas, mejillones) en cuatro polígonos de las áreas de cosecha de San Felipe Puertecitos y el Alto Golfo.

Las áreas pertenecen a las empresas Pacific Dragon Seafood, Pristina de Baja California, Estela Martínez Salgado de San Felipe y Unidad Pesquera Fortaleza Marina del Alto Golfo, quedando prohibida la cosecha y comercialización para los productos que se recolectan ahí a partir del pasado 10 de abril.

Las muestras fueron analizadas por el Laboratorio Estatal de Salud Pública, donde se arrojó un resultado por arriba del límite máximo permisible establecido en la NOM-242-SSA1-2009, para evitar afectaciones en la salud de los consumidores se determinó la suspensión de las actividades de recolección y comercialización, hasta volver a contar con tres resultados negativos de esta toxina de forma consecutiva.

Es importante mencionar que todas las empresas se encuentran colaborando con personal de salud en el cumplimiento de la NOM-031-SSA1-1993, para cumplir con los estándares de refrigeración y transportación de los productos para su venta, lo cual contribuye a la salud de las y los usuarios.

La saxitoxina es una neurotoxina que es producida por el fitoplancton y algas que son consumidos por los peces, ostras, almejas, mejillones entre otros, lo cual puede ocasionar cólicos, espasmos abdominales, diarrea, vómitos, náuseas y en ocasiones incapacidad para mover brazos y piernas.

Este fenómeno también es conocido como marea roja, el cual tiene un origen natural; alguien que ingiere productos contaminados puede presentar un resultado favorable en el estado general de la persona afectada en un lapso de 18 horas, pero es importante que sea valorada por el médico.

El personal de verificación de la COEPRIS BC realiza visitas constantes a las empresas de este puerto que se dedican a la comercialización del producto para garantizar que se cumpla con estas especificaciones, donde se señala que la congelación debe estar a máximo -18 ºC, reduciendo los cambios enzimáticos y microbiológicos.