mar. Dic 24th, 2024

ENSENADA.- Después de 15 años, una de las mayores necesidades de Ensenada en materia hídrica será atendida gracias a la rehabilitación de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales El Naranjo, así lo dio a conocer la mañana de este jueves el titular de la Secretaría para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua de Baja California (SEPROA), Armando Samaniego.

En representación de la gobernadora Marina del Pilar Avila Olmeda y acompañado por Alonso Centeno Hernández, director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada (CESPE) y de Francisco Bernal, director de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), el secretario Samaniego se mostró entusiasmado por el hecho de poder brindarle a las y los ensenadenses una mejor calidad en sus servicios de agua con esta obra que asciende a los 167.6 millones de pesos.

Serán alrededor de 216 mil personas las que se verán beneficiadas con la rehabilitación que incluirá reparaciones en áreas como el deshidratador de lodos, la tolva metálica, el triturador de basura, los clarificadores, los sopladores, los reactores biológicos y el sistema de cloración.

La que será la planta más moderna de todo el Estado tiene como su mayor intención brindarle a Ensenada agua de la mejor calidad y verá culminada su primera etapa de rehabilitación en un lapso de ocho meses.

En su mensaje a la comunidad ensenadense, Armando Samaniego explicó que serán tres procesos de rehabilitación a los que se someta la Planta El Naranjo, recalcando que luego de más de diez años de abandono total, por fin se le hará justicia a una gran parte del pueblo de esa ciudad, gracias a las indicaciones de la gobernadora Marina del Pilar, que a él le ha tocado atender.

Asimismo, les pidió a las y los ciudadanos tener confianza al trabajo que se empezará a realizar, pues todo el proceso ha sido llevado de la manera más profesional y transparente posible.

Por su parte, el director de la paraestatal, Alonso Centeno Hernández, informó que las acciones que a partir de hoy se ejecutan van encaminadas a una mejora en el funcionamiento de la planta, así como también ampliar su capacidad de recepción, tratar una mayor cantidad de aguas residuales, mejorar los procesos y dar un adecuado tratamiento a las aguas residuales.