TIJUANA.- Los accidentes viales y en el hogar pueden y deben evitarse, ya que en la actualidad constituyen la segunda causa de muerte en Baja California, e involucran a personas adultas mayores, automovilistas, peatones e incluso a niñas, niños y jóvenes.
Autoridades de la Jurisdicción de Servicios de Salud Tijuana (JSST), hacen un llamado a las personas adultas mayores y a sus familias para identificar riesgos de accidentes, especialmente caídas, que pueden ser en escaleras, en desniveles, en pisos y por subir a sillas o escaleras, lo cual deben evitar en la medida de lo posible.
Alejandro García, coordinador del Programa Prevención de Accidentes y Lesiones de la JSST, señaló que en el caso de las y los automovilistas, durante el año 2023 fueron frecuentes los accidentes de tránsito, derivados de conducir a exceso de velocidad, no respetar el reglamento de tránsito y conducir bajo los influjos del alcohol o algún otro tipo de enervantes.
También, fueron frecuentes los atropellamientos a peatones, principalmente por no utilizar las esquinas para cruzar vialidades o no respetar los semáforos, por lo que las autoridades de salud hacen el llamado a no distraerse y mantenerse con atención a lo que pasa a su alrededor, sobre todo, en el área de las ciudades con tránsito vehicular intenso.
A lo largo del año, personal del Programa de Accidentes y Lesiones de la JSST, acudió a planteles escolares de diferentes niveles a llevar capacitación a las y los jóvenes sobre estos temas, con dinámicas precisas para ayudarlos a tomar conciencia sobre la prevención de accidentes.
Se llevaron ejercicios de seguridad, en los cuales a las y los alumnos se les recomendó principalmente evitar el consumo de drogas y bebidas alcohólicas, así como no usar el teléfono celular mientras se camina por las banquetas, se maneja una bicicleta, vehículo de motor, patinetas eléctricas o motocicletas, ya que esto aumenta el riesgo de sufrir un accidente.
Además, como parte de las dinámicas, para ejemplificar, se colocaron lentes “Fatal Visión”, que distorsionan la vista del estudiante y simulan el consumo de alcohol o drogas. Cuando se les pide caminar en línea recta, se ven imposibilitados a hacerlo.
Otro de los ejercicios es con el “Tapete de distractores”, que consiste en colocar figuras en un tapete y se registra el tiempo. La segunda parte del ejercicio se acomoda las piezas al mismo tiempo que se envía un mensaje de texto utilizando el teléfono celular. El resultado es un mayor tiempo para realizar estas tareas y se demuestra que al distraerse en la vía pública, la persona es más propensa a sufrir accidentes.